Por: Lizeth Guerra Arrieta(Practicante Ciudad Arte)
En homenaje a la danza
Fotografías 1 y 2 de: Natalia Osorio
Esta forma de expresión cultural transmite a la sociedad la identidad y el producto de un contexto y es una de las tantas formas que ha encontrado el hombre para materializar su cultura. Este es el mundo de la magia en el que el peinado, el traje, el maquillaje, el brillo, la actitud, el color y el sonido se sincronizan para fusionarlo a través de la danza.
Encontrarse y entregarse al movimiento, a una ansiedad sin fin, es la mejor forma de expresar las sensaciones físicas que se convierten en pasos acompañados de ritmo, transformados para detallar también lo que buscamos decir que somos.
El ser humano siempre ha buscado plasmar o materializar sus pensamientos, sentimientos, ideas y emociones a lo largo de la historia. Para ello, inventó diferentes formas de lograrlo: innovó con la escritura, la escultura, la pintura, la literatura, el cine, la música y, a esta creación se le denomino arte.
Todas las artes tienen la capacidad de obtener el regocijo del espíritu convirtiéndose en la sublimación de los sentimientos, oscuros o llenos de luz. El arte en particular requiere de la voluntad necesaria para atreverse a enfrentar el miedo y lograr recuperar la confianza. Este aspecto en particular es importante para lograr danzar, aspecto que queremos resaltar. Lo vemos como armonizar el cuerpo con la mente y demostrarlo a través de movimientos fluidos, pues somos en sus manos universos de infinita pasión, momento perfecto para transportarnos al frenesí.
La danza permite ampliar los alcances de la comunicación como parte del lenguaje, hace parte de una estructura que utiliza el acto comunicativo corporal no verbal que, por medio de los movimientos del cuerpo, transmite un contenido de manera diferente, estética y artística. Con ésta, se expresan emociones propias y por medio de ella se comunican las ideas que constituyen la vida en la sociedad. Ideas que luego se convierten en tradición y costumbre y que determinan la cultura y distinción de los pueblos, de las sociedades y de las épocas.
El hombre ha utilizado y utilizará esta forma artística y de expresión para crear y recrear sus comportamientos, rituales y costumbres con las que se integra a una comunidad o región y que lo hacen identificarse como miembro de una cultura.
Foto de archivo: Bailarines del Balcón de los Artistas y Ballet Nacional El Firulete
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